¿Puta barata?

-Hola princesa...
-No soy princesa, lo sabes...
-¿Pues qué eres pequeña? -dijo después de soltar una carcajada.
-Pues... una puta barata...
-No eres una puta barata, eres mi pequeña princesa.
-Soy una puta barata que se acuesta con un hombre de cuarenta años...
-Deja de decir chorradas. Eres una princesita a la que me gusta mirar cuando duerme, cuando sonríe, cuando llora... Eres especial... lo sabes.
-¿Sí?
-Sí... ¿te paso a buscar y nos vemos?
-Vale.
Y colgó el teléfono con una sonrisa. Sabía de sobra que no era una puta barata... ya que si fuera puta, sería de las putas elegantes. Pero a veces sí que se sentía puta. Y ella sabía que sentirse princesa, sólo una vez en la vida, sería complicado...
Por lo que eligió su mejor combinación, y con el pinta labios más rojo que encontró... Bajó las escaleras de su casa pensando, que con suerte, hoy podría ser el día que se sintiera princesa...
O no...